Foto: Abarth 595 Competizione, Ibiza (España)        Créditos: Franko Klinge

El coche de alquiler

Alquilar un coche nos da la oportunidad de conducir vehículos que, por diversas razones, no adquiriríamos normalmente.

Este año pasé unos días de vacaciones en Ibiza, una de las islas Baleares en el Mediterráneo.

 

Elegí un alojamiento bastante alejado de la ciudad, frente a una pequeña cala en el norte de la isla, para poder disfrutar de la naturaleza y los paisajes. Estando ahí, lo más práctico para movilizarme fue conducir un automvóvil.

 

Alquilar un coche nos da la oportunidad de conducir vehículos que por diversas razones no adquiriríamos normalmente. Es una buena oportunidad para probar algo diferente. 

 

Quería algo pequeño y práctico, pero a la vez ágil y divertido para disfrutar las estrechas carreteras con sus curvas cerradas.

 

Finalmente me decidí por un Abarth 595 Competizione, la interpretación italiana de un pocket rocket, que cumplía con todos los requisitos. 

 

Partiendo de la base del Fiat 500, este Abarth no sólo tiene modificaciones estéticas, sino también en cuanto a prestaciones. 

 

El motor de cuatro cilindros y 1,4l con turbo e intercooler entrega 180 CV y, acoplado a una caja manual de 5 velocidades, produce un sonido agradable a través de sus cuatro salidas de escape. 

 

Los frenos, de discos ventilados y perforados, con pinzas amarillas, son de la firma Brembo.

 

En el interior destacan las butacas en cuero de dos colores, el tablero con acabado en alcántara, los pedales de aluminio y demás detalles que le dan un toque deportivo; sobretodo después de presionar el botón con el escorpión (símbolo de Abarth) en la consola central. 

 

Aunque en esta isla el límite de velocidad es de solo 80 km/h, esto no fue impedimento para disfrutar del pequeño Abarth durante mi estadía.

 

Nuestra relación con los vehículos de alquiler es extraña y hasta contradictoria. Ellos son, en cierta forma, ajenos y desconocidos pero, al mismo tiempo, forman parte de los recuerdos de nuestros viajes. Por eso me será imposible recordar estas vacaciones en Ibiza sin tener como protagonista al pequeño bólido rojo italiano.FK

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