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| Foto: Audi e-tron GT Créditos: Audi AG |
Migración eléctrica
Tradicionalmente se incluyen las innovaciones primero en los vehículos de alta gama y luego continúan hacia abajo hasta llegar al segmento de entrada.
En aproximadamente una década solo se podrá vender vehículos nuevos de cero emisiones en los principales mercados automotrices del mundo. Este es un cambio tecnológico que no solo obedece a una evolución del producto, sino que implica la desaparición de la tecnología universal anterior, los motores de combustión interna.
No se trata de un cambio brusco sino de un proceso que incluye la actual etapa de transición con el aumento gradual de la proporción de autos eléctricos en el mercado.
Los autos eléctricos son actualmente más caros que modelos equivalentes con motor de combustión. Por eso, lo más lógico parecería que primero se renueven los vehículos más caros.
Tradicionalmente se incluyen las innovaciones primero en los vehículos de alta gama y luego continúan hacia abajo hasta llegar al segmento de entrada. Pero en este caso en especial hay otros factores en juego.
Con la entrada en vigor de nuevas y más estrictas normas de emisiones, incluyendo pruebas en condiciones normales de uso, los sistemas de tratamiento de gases de escape se vuelven cada vez más complejos y caros. No solo su proceso de fabricación se vuelve más costoso, sino que los precios de materiales indispensables como los metales preciosos de sus catalizadores (platino, rodio y paladio) siguen una tendencia al alza que no cambiará en el futuro cercano.
Como consecuencia, el precio de un motor de combustión también aumenta, así como su proporción dentro del costo total de un vehículo.
Los principales afectados son los autos pequeños y baratos, donde el margen de ganancia es menor, ya que tienen menos opciones de equipamiento y además el cliente en este segmento es más sensible a cambios en el precio.
Por estas razones, lo más probable es que sean justamente los vehículos con motor de combustión del segmento de entrada los primeros en desaparecer de la oferta de los fabricantes.FK
No se trata de un cambio brusco sino de un proceso que incluye la actual etapa de transición con el aumento gradual de la proporción de autos eléctricos en el mercado.
Los autos eléctricos son actualmente más caros que modelos equivalentes con motor de combustión. Por eso, lo más lógico parecería que primero se renueven los vehículos más caros.
Tradicionalmente se incluyen las innovaciones primero en los vehículos de alta gama y luego continúan hacia abajo hasta llegar al segmento de entrada. Pero en este caso en especial hay otros factores en juego.
Con la entrada en vigor de nuevas y más estrictas normas de emisiones, incluyendo pruebas en condiciones normales de uso, los sistemas de tratamiento de gases de escape se vuelven cada vez más complejos y caros. No solo su proceso de fabricación se vuelve más costoso, sino que los precios de materiales indispensables como los metales preciosos de sus catalizadores (platino, rodio y paladio) siguen una tendencia al alza que no cambiará en el futuro cercano.
Como consecuencia, el precio de un motor de combustión también aumenta, así como su proporción dentro del costo total de un vehículo.
Los principales afectados son los autos pequeños y baratos, donde el margen de ganancia es menor, ya que tienen menos opciones de equipamiento y además el cliente en este segmento es más sensible a cambios en el precio.
Por estas razones, lo más probable es que sean justamente los vehículos con motor de combustión del segmento de entrada los primeros en desaparecer de la oferta de los fabricantes.FK
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